Tanto en superficie como bajo tierra, existen numerosas guias para la seguridad y el higiene en el trabajo en la industria minera. Basadas en siglos de experiencia, dichas guias se han traducido en una reducción significativa de muchos riesgos y peligros. En este sentido, la minería moderna puede utilizar hoy en día innovadoras tecnologías de detección, así como equipos de protección personal (EPP) eficaces.
Protección óptima en cualquier situación
Ya sea durante las operaciones de voladura, extracción, excavación, bombeo, mantenimiento o limpieza, los gases y el polvo que pueden generarse en estos procesos pueden resultar perjudiciales para su salud o derivar en un accidente grave. Según distintos escenarios se muestra cómo puede proteger al personal y los equipos en estos casos:
- Para la fuga de gas metano en extracción de carbón, se deberá utilizar un detector multigás con sensor de explosión, el cual emite una alarma que permite que los mineros abandonen rápidamente la zona.
- Cuando se liberan agentes químicos durante el proceso minero, el empleado debe protegerse con traje de protección química y protección respiratoria.
- Antes de inspeccionar un depósito, debe realizarse medición de paso; también un control constante de la atmósfera para prevenir riesgos en el proceso.
- Si se están soldando partes de un camión en un taller subterráneo, se generan humos peligrosos, por lo que se deben utilizar equipos filtrantes motorizados para proteger al personal.
Seguridad ocupacional
Advertir a los empleados acerca de la exposición a sustancias peligrosas como polvos tóxicos, emisiones de combustible diésel y emisiones de voladuras, y protegerlos de dichos peligros es extremadamente importante. Lo mismo cabe decir para una alarma de emergencia en caso de incendio, explosión de gas o fallo del sistema de ventilación.
Manejo de sustancias peligrosas
Durante la descarga, mezcla o transferencia de sustancias químicas, por ejemplo, al lixiviar o concentrar, a veces es inevitable el contacto directo con sustancias peligrosas. Los empleados deben usar una protección respiratoria o un traje de protección (EPP) adecuado para evitar una contaminación peligrosa.Los trajes de protección química se emplean en cualquier momento y situación en que una persona deba protegerse de los efectos nocivos de líquidos peligrosos. Si existe un riesgo de exposición del cuerpo a productos químicos sólidos o líquidos, los buzos completos son la única manera de asegurar una protección total.
Espacios confinados
Ventilación y medios de escape limitados, falta de oxígeno y presencia de sustancias tóxicas: cuando se trata de espacios confinados son muchos los riesgos. Por ello, se deben respetar unas estrictas normas de seguridad. Entre ellas se incluye la realización de una medición de seguridad antes de acceder a un área para comprobar que es seguro hacerlo.
Trabajos de mantenimiento
Al llevar a cabo trabajos de mantenimiento y reparación, los empleados están expuestos a gases, humos y polvo de soldadura mientras realizan sus tareas principales como el corte, molienda y pintado de vehículos o maquinaria. Un protección respiratoria cómoda les permite trabajar sin preocupaciones.